Hace poco recibimos la
noticia de que la Juez argentina María Servini ordena detener a cuatro antiguos
miembros de las fuerzas de seguridad españolas por crímenes del franquismo (dos
de ellos ya fallecidos) , la ONU realiza una visita a nuestro país para
completar un informe sobre cómo se está tratando el tema de las desapariciones
forzadas o involuntarias en España y para ello escucha a las víctimas y sus
familiares y, como era de esperar, los resultados de ese informe no hace más
que apoyar nuestra lucha. Todo esto supone un gran empuje para muchas personas
que desde años atrás pregonaban que en este país no existe trato humanitario y
de justicia ante los/ as desaparecidos/ as y víctimas de la Guerra Civil
española y su posterior Dictadura.
Vamos por el buen
camino...
El día 27 de septiembre de 2013 fue
un día muy importante para esta asociación y todo el colectivo memorialista en
general.
Nervios, prisas de última hora,
dudas ante como plantear el breve discurso que nos pedía Paqui Maqueda debido a
la cantidad de familiares que estábamos citados y al cansancio acumulado de
los/ as miembros del Grupo de Trabajo de
la ONU, pero sobre todo “eufóricos/ as”.
Representando a la Asociación para
la Recuperación de la Memoria Histórica “19 mujeres” de Guillena acudieron
Lucía, Manolo y M. Dolores.
Nuestra intervención en voz de M.
Dolores fue breve destacando en el mensaje que aunque tras mucho trabajo por
parte de los familiares y apoyo de
algunas instituciones habíamos exhumado a nuestras 17 Rosas, Guillena
seguía contando con una lista enorme de desaparecidos.
“Es fundamental la localización de
nuestros desaparecidos y, sobre todo, poder condenar a los culpables de la
barbarie ocurrida en todos los rincones de Andalucía y resto de comunidades
autónomas”.
También intervinieron vecinos de
Osuna, Marchena, Fuente de Andalucía, Coria del Río, Puebla del Río, El
Madroño, familiares de Sevilla capital, Lebrija, etc. En un segundo turno
atendieron a familiares de otras provincias andaluzas y al siguiente día
atendieron a abogados e historiadores.
Todos los testimonios fueron
escuchados atentamente por el Grupo de Trabajo y por los compañeros y
compañeras que recordaban las historias personales ya conocidas de ante mano
con lágrimas en los ojos. Aun así, todos y todas demostraron una fuerza enorme
al sujetar la foto de su familiar, contar su dolor y pedir justicia.
“No se puede
desentender la ONU de esta masacre”, decía uno de los familiares.
Otro vecino de
Lebrija con lágrimas en los ojos decía “es el único país en el que no se ha
hecho justicia con los pactos de la Moncloa” “Los gobiernos de izquierda han
mirado para otro lado cuando estaban en el poder”.
“No nos olviden”,
pedía un familiar sujetando la fotografía de su familiar.
Nadie piensa
que sea fácil, pero nuestros motores ya están encendidos.
Adelante,
sigamos trabajando...
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